Los Cabos, B.C.S.- Nombradas como “Fiestas Patrias con causa” el XII Ayuntamiento de Los Cabos que encabeza Arturo de la Rosa Escalante, a pesar de diversas problemáticas sociales y de luto en la comunidad, decidieron llevar a cabo las celebraciones por las Fiestas Patrias 2017, tanto en la cabecera municipal como en sus diferentes delegaciones, donde además han solicitado a la comunidad llevar víveres pues tendrán centros de acopio para “los afectados” de la T.T. “Lidia”, acción que los vecinos de Chula Vista y Puerto nuevo no están de acuerdo por las circunstancias adversas que están viviendo.
Gastar erario público en Fiestas Patrias en estas circunstancias, donde la herida de los familiares de los fallecidos a consecuencia de esta Tormenta aun no cierra y ante el peligro latente de perder sus bienes materiales o su propia vida, los vecinos de Chula Vista y Puerto Nuevo mostraron su molestia e indignación.
Recordemos que una de las problemáticas sociales que quedo en evidencia al paso de “Lidia” en el municipio, es que tanto el fraccionamiento Chula Vista y Puerto Nuevo en C.S.L. y SJD respectivamente están construidos bajo lechos de arroyos, y por ello colapsaron dos de sus edificios, que afortunadamente ya habían sido desalojados minutos antes con el aviso de los mismos vecinos.
Según los vecinos son alrededor de 2 mil familias en ambos fraccionamientos; familias que siguen buscando solución a su problemática pidiendo su reubicación y aseguran que no se les hace correcto que se gaste erario público para llevar a cabo las actividades de las Fiestas Patrias 2017.
Sin embargo, vecinos de Chula Vista y Puerto Nuevo, siendo de los más afectados en la comunidad, quienes están en busca su reubicación, no se les tomo en cuenta para la entrega de víveres.
Al respecto el señor Sergio Losoya, Presidente del Comité de Chulavista dijo: “La verdad no se me hace correcto que se hagan estas fiestas. Nosotros somos una comunidad trabajadora, no le voy a decir que no necesitamos ese tipo de ayuda (víveres), no nos caería mal, porque estamos pagando una vivienda y merma muchos nuestros ingresos, pero despensas nunca nos han llevado”.
Por su parte Miriam Sandoval, vecina del fraccionamiento Puerto Nuevo mencionó: “Para empezar yo creo que no deberían hacer fiestas, no estamos como para festejar nada”, así mismo compartió que cuando vino el Presidente de la Republica Enrique Peña Nieto, ellos no quisieron tomar las despensas, y solo exigieron su reubicación. Pero admitió que independientemente del problema central que es la petición de reubicación, considera que si deberían apoyar con víveres a las familias de Puerto Nuevo que realmente las necesitan.
Cabe especificar que los vecinos de ambos fraccionamientos son personas que están pagando créditos en su mayoría de Infonavit o Fovissste, quienes en estos momentos no les han resulto nada, pues la deuda y los intereses siguen corriendo; por lo que hasta ahora siguen en trámites para poder entablar sus denuncias ante el ministerio público, y exigir su reubicación pues se encuentran sobre lechos de arroyos, construidos por la empresa HOMEX.
Además en ambos fraccionamientos señalaron que viven con temor y con “la maleta en la mano”, pues están preocupados por posibles lluvias que pudieran darse en la entidad, pues los arroyos crecen tan rápido con cualquier lluvia que sus vidas corren peligro.
La situación más triste es para los afectados de los edificios colapsados, pues sus muebles, ropa, electrodomésticos y absolutamente todo quedó sepultado entre los escombros, por lo que han tenido que vivir en techos prestados con familiares o amistades.
Respecto a los vecinos que continúan en la zona claramente peligrosa, están desalentados pues tienen conocimiento que los albergues temporales habilitados por el XII Ayuntamiento fueron insuficientes. En ese tema la vecina Miriam dijo que ella estuvo en esta reciente Tormenta junto a su familia en el albergue de la Técnica #14 en San José del Cabo, donde no se contaba con personal capacitado para atender la emergencia, y el espacio así como el agua purificada fue insuficiente.
Es así como mientras se gasta erario público en unas fiestas, y parte de la ciudadanía organizada sigue volcada en ayuda entregando víveres en centros de acopio, familias de Chula Vista y Puerto Nuevo, continúan esperando sean reubicados pues viven con el temor de una lluvia que termine de colapsar las edificaciones.